Redacción
México vive con incertidumbre a una semana del arranque de las eliminatorias mundialistas. La FIFA decidirá el jueves si la Selección Nacional puede jugar con público en su segundo partido en casa del Octagonal Final.
El organismo rector del futbol, a través de su Comisión Disciplinaria, ya tomó tomó la determinación de que el primer partido (2 de septiembre contra Jamaica) se juegue sin gente en las tribunas, como sanción por el grito homofóbico emitido en el partido contra República Dominicana durante el Preolímpico de marzo en Guadalajara.
La Federación Mexicana ha presentado las apelaciones correspondientes. Mediante las pruebas que han enviado a la FIFA, se pretende que el partido del 7 de octubre contra Canadá (segundo del Tri como local) pueda contar con público, de acuerdo con información de ESPN.
Será la primera vez que la FIFA ejerza una sanción punitiva que castigue la entrada del público. Hasta ahora, todas las sanciones habían sido económicas. La última multa recibida por la Federación Mexicana tuvo lugar en julio.
La Comisión Disciplinaria de la FIFA multó a la FMD por 100 mil francos suizos (unos dos millones de pesos mexicanos) por los gritos emitidos en el partido amistoso contra Islandia del 29 de mayo. Pero no es la única en lo que va del año. En junio la FIFA cobró 1,3 millones de pesos debido a los gritos que se presentaron durante el Preolímpico de Guadalajara, particularmente en los partidos contra la República Dominicana y Estados Unidos.
La pandemia significó una pausa también para este tema. Primero, con la ausencia de actividad. Y cuando la Selección Azteca volvió a las canchas, los partidos se llevaron a cabo sin público. Todo cambió con el Preolímpico de Guadalajara, donde se permitió un aforo restringido en las sedes. La situación se agudizó en las semanas previas al Final Four de la Liga de las Naciones, que marcó el comienzo de un intenso verano para las selecciones nacionales.
México volvió a jugar con gente en las gradas. La situación de la pandemia en Estados Unidos permitió la vuelta de la afición, en gran medida gracias al avance en la vacunación en dicho país. Sin embargo, el efecto colateral que esa medida tuvo resultó inevitable: cada vez que los partidos iban por caminos espinosos, la afición hacía sentir su reprobación a través del grito.
A pesar de que la frase se percibe en las gradas mexicanas desde principios del nuevo siglo, la tensión por su uso se remonta al Mundial de Brasil 2014. Como en cada competición a la que acudía la selección, miles de aficionados emitían el insulto antes del despeje de cada arquero rival. Pronto la expresión llamó la atención de las autoridades de la FIFA y desde aquel torneo se lanzó un apercibimiento para que los aficionados dejarán de realizarlo.
La Federación Mexicana ha elaborado diversas campañas con la intención de erradicar el grito de los estadios, en colaboración con los jugadores. Hasta el momento, las diversas sanciones no han sido suficientes para persuadir al público mexicano. El castigo máximo al que se puede llegar, en caso de reincidencia, dejaría a México sin oportunidades de ir al Mundial de Qatar 2022.
Andrés Guardado, capitán de la selección, se vio envuelto en una polémica recientemente debido al uso de esa palabra. Al regreso de Diego Lainez al Betis, luego de participar en Tokio 2020, Guardado lanzó la expresión “somos medalla de bronce, pu****”, que recibió diversas críticas en redes sociales.
La última medida de gran resonancia tomada por las autoridades del futbol mexicano tuvo que ver con el nombre del torneo actual de la Liga MX: se decidió darle por nombre Grita México, con la intención de promover otras opciones entre los aficionados.
México enfrentará una jornada triple en cada fecha, un hecho inusual en las eliminatorias de los últimos años. En esta primera jornada, deberá hacer frente a Jamaica, Panamá y Costa Rica. La actividad será incesante, pues solo un mes más tarde vendrá la segunda tanda, en la que los rivales serán Canadá, Honduras y El Salvador. Si la sanción prospera, el partido contra los catrachos será el que marque el regreso de la afición al Estadio Azteca para ver al Tri.
