- Los personajes que interpretaron los actores era una pareja que no le apenaba el qué dirán, y mucho menos se dejaban guiar bajo las normas sociales que regían esa época.
Redacción
Elsa Aguirre y Mauricio Garcés protagonizaron más de una película juntos, sin embargo fue gracias El Día de la Boda, dirigida por René Cardona Jr en 1968, que ambos actores convivieron por primera vez frente a una cámara.
El Día de la Boda narra la historia de Ricardo, interpretado por Enrique Rambal, y Adriana Mendoza, interpretada por Lucy Gallardo, un matrimonio que se rige bajo las normas morales de la época en que se desarrollo. Sin embargo, sus ideas se verán trastocadas al momento que Marta, su hija, resulta embarazada de su novio.
Garcés y Aguirre intervienen en el filme al ser amigos de los protagonistas, uno con el nombre de Raúl y la otra por Gilda, los cuales no cumplen con los estándares sociales por los que se rigen el matrimonio de Ricardo y Adriana.
A pesar de que a Raúl y Gilda no les preocupa el que dirán, el personaje de Elsa Aguirre quiere que su hija Andrea, interpretado por Nora Larraga, tenga un matrimonio convencional.
Otras de las películas en las que el Don Juan del cine mexicano y Aguirre compartieron set de filmación fueron El Matrimonio es como el Demonio y El Cuerpazo del Delito. La primera salió un año después de El día de la Boda y fue dirigida también por Cardona, mientras que la segunda estuvo a cargo de Rafael Baledón y Sergio Véjar. En esta última también compartió créditos el comediante Roberto Gómez Bolaños.
protagonizaron más de una película juntos, sin embargo fue gracias El Día de la Boda, dirigida por René Cardona Jr en 1968, que ambos actores convivieron por primera vez frente a una cámara.
El Día de la Boda narra la historia de Ricardo, interpretado por Enrique Rambal, y Adriana Mendoza, interpretada por Lucy Gallardo, un matrimonio que se rige bajo las normas morales de la época en que se desarrollo. Sin embargo, sus ideas se verán trastocadas al momento que Marta, su hija, resulta embarazada de su novio.
Garcés y Aguirre intervienen en el filme al ser amigos de los protagonistas, uno con el nombre de Raúl y la otra por Gilda, los cuales no cumplen con los estándares sociales por los que se rigen el matrimonio de Ricardo y Adriana.
A pesar de que a Raúl y Gilda no les preocupa el que dirán, el personaje de Elsa Aguirre quiere que su hija Andrea, interpretado por Nora Larraga, tenga un matrimonio convencional.
Otras de las películas en las que el Don Juan del cine mexicano y Aguirre compartieron set de filmación fueron El Matrimonio es como el Demonio y El Cuerpazo del Delito. La primera salió un año después de El día de la Boda y fue dirigida también por Cardona, mientras que la segunda estuvo a cargo de Rafael Baledón y Sergio Véjar. En esta última también compartió créditos el comediante Roberto Gómez Bolaños.
Elsa Aguirre apantalló a muchos desde los 15 años, edad en la que debutó en el cine gracias a la cinta El sexo fuerte. A partir de 1945 tendría una carrera sin descanso. Sumó varias películas, trabajó con estrellas como Jorge Negrete, Pedro Infante e Ignacio López Tarso, y poco a poco estaría en filmes que hasta la fecha son reconocidos como Ojos de juventud y Una mujer decente.
A pesar de que la carrera de Aguirre se encontraba en el mayor de sus éxitos, a la edad de 29 años, la actriz decidió dejar su carrera de actuación y poner su atención en otros ámbitos de su vida. Sería en esta época que conocería al periodista Armando Rodríguez Morado, y a quien haría su esposo.
En el programa La historia detrás del mito, Jesús Aguirre, hermano de la gran actriz, recordó que una ocasión el esposo de Elsa quemó dentro de su jaula a todos los canarios que ella cuidaba. No supo los motivos de este acto, en especial porque Armando estaba al tanto de lo mucho que le gustaban las aves a Elsa.
En entrevista con Gustavo Adolfo Infante, Elsa comentó que era un hombre que bebía mucho; a la par, la actriz tuvo que acostumbrarse a que Armando se saliera a las 4 de la mañana de casa para ir a tomar. Esto desembocaría una serie de agresiones en contra de la actriz, motivo por el cual decidió divorciarse.
Por otro lado, Mauricio Garcés tuvo popularidad por su representación satírica del galán seductor maduro de la alta sociedad, Garcés no buscaba ser un galán como Pedro Infante, Julio Alemán u otros actores, él solamente hacía comedia del rol del galán de cine.
Su incursión en el cine mexicano empezó a los 24 años gracias a su tío fotógrafo Tufic Yazbek quien le dio la oportunidad de tener un papel en la película La muerte enamorada en 1950. Mauricio tomó el apellido Garcés del personaje que interpretó, pues según el actor, pensó que la letra “g” podría traerle buena suerte, ya que varios de los artistas que él admiraba tenían esta letra en sus nombres, tales como Clark Gable, Gary Cooper y Cary Grant.
