Jinete murió tras recibir una patada de uno de sus caballos en el pecho

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Jinete murió tras recibir una patada de uno de sus caballos en el pecho

Redacción

El mundo de la equitación sufrió la inesperada pérdida de Elena Legarra Martiarena. La amazona murió este lunes al sufrir un accidente con uno de sus caballos, que le terminó costando la vida. Minutos después de la confirmación del deceso, la Federación Hípica Española (RFHE), la Federación Navarra y Consejo Superior de Deportes (CSD) enviaron mensajes de apoyo para la familia ante la triste noticia.

La causa del fallecimiento de la española de 43 años fue la patada que le pegó accidentalmente uno de sus caballos al intentar bajarlo de un camión. “Profunda tristeza por el fatal accidente de la amazona Elena Legarra. Poco después de haber competido en la Liga Norte en Jaizubía ha perdido la vida”, escribió la RFEH en sus redes sociales. Y agregó los detalles del altercado: “La causa fue una coz en el tórax de uno de sus caballos al querer descargarlo. Nuestro más sentido pésame. Descansa en paz”.

“Queremos enviar nuestras más profundas condolencias a la RFHE y a la familia y amigos de Elena. La pérdida de alguien cercano nunca es fácil. Todo nuestro apoyo y nuestro ánimo”, redactó la cuenta oficial del CDS al enterarse de lo sucedido. Según los detalles que pudieron recolectar las autoridades, el hecho ocurrió en el centro ecuestre Robledales en Zenots cerca de las 18:50 horas del lunes, mientras Lagarra bajaba a los caballos del camión que los transportaba.

La Policía Foral de Elizondo acudió al lugar de los hechos y trasladaron el cuerpo al Instituto Navarro de Medicina Legal, donde le realizaron la autopsia correspondiente a la deportista y llegaron a la conclusión de que la coz que pegó cerca del corazón, y fue la causa de la muerte. Diarios locales lamentaron la tragedia e informaron que Elena dedicó toda su vida alrededor de la equitación, mientras que en paralelo se formó en el Colegio Miravalles y continuó sus estudios en la Universidad de Navarra.

Su talento en el salto la hizo conocida dentro del ambiente y era una reconocida competidora en toda España, con varios galardones a nivel nacional. Además, administraba una empresa dedicada al tratamiento de aluminios, mientras que a sus momentos libres los utilizaba para concentrarse en la hípica. Madre de tres hijas, logró transmitirles la pasión por los caballos a una de ellas, quien seguramente buscará continuar el legado que dejó su referente en el deporte.