Así lo informó el enviado de seguridad energética de EEUU, Amos Hochstein, en una audiencia del Congreso. Pese al impacto de las sanciones, el aumento del precio internacional del gas y el petróleo inclinó la balanza a favor de Moscú
Red de corresponsales
Rusia puede estar obteniendo más ingresos de sus combustibles fósiles ahora que poco antes de su invasión de Ucrania, ya que el aumento de los precios mundiales compensa el impacto de los esfuerzos occidentales para restringir sus ventas, dijo el enviado de seguridad energética de Estados Unidos, Amos Hochstein, a legisladores durante una audiencia el jueves.
“No puedo negar eso”, dijo Hochstein al Subcomité del Senado sobre Europa y Cooperación en Seguridad Regional en respuesta a una pregunta sobre si Moscú está ganando más dinero ahora con sus ventas de crudo y gas que un par de meses antes de que comenzara la guerra.
Estados Unidos y la Unión Europea acordaron prohibir las importaciones de combustibles fósiles rusos e impusieron sanciones crecientes para castigar al país por su invasión de Ucrania.
Si bien estas medidas frenaron el comercio mundial de combustibles fósiles rusos, también contribuyeron a provocar un aumento de los precios mundiales del petróleo y el gas. Los precios del crudo Brent se acercaban el jueves a un máximo de tres meses por encima de los 123 dólares el barril.
Hochstein dijo que el aumento de la demanda mundial de petróleo por parte de los consumidores tras la pandemia de COVID-19 fue “mucho mayor, más fuerte de lo que nadie predijo”.
Al mismo tiempo, Rusia ha podido vender más cargamentos a otros compradores, incluidos los principales consumidores de energía, China e India, ofreciéndolo con un descuento respecto al petróleo de otros orígenes.
Hochstein dijo que, aunque esas ventas rusas a China e India han tenido descuentos en comparación con los suministros de otros países, el alza de precios en el mercado mundial significa que los ingresos de Rusia son probablemente mayores ahora.
Las compras indias de crudo ruso se duplicaron con creces en mayo con respecto al mes anterior, alcanzando un récord de más de 840.000 barriles diarios, y es probable que vuelvan a aumentar en junio, según el analista de materias primas Kpler.
Rusia garantizó que no habrá más cortes
Mientras tanto, el Kremlin afirmó este jueves que no se esperan nuevos cortes de gas en Europa por parte de la empresa estatal Gazprom porque la mayoría de los compradores del combustible han empezado a pagar en rublos.
”El sistema (para pagar el gas en rublos) funciona y los que lo reciben, trabajan según prevé el nuevo sistema”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
Agregó que los países que rechazaron realizar el pago en rublos, ya habían dejado de recibir el combustible.
Así, el pasado 1 de junio el gigante gasístico ruso interrumpió el suministro de gas a las compañías Ørsted, principal grupo energético de Dinamarca, y a Shell Energy Europe, que suministra gas a Alemania, por negarse éstas a pagar por el combustible en la moneda rusa.
Previamente, por el mismo motivo se detuvo el flujo del combustible a Países Bajos, Polonia, Bulgaria y Finlandia.
Rusia obliga desde el 1 de abril a todos los clientes extranjeros de países considerados “inamistosos” por las sanciones impuestas a raíz de la campaña militar rusa en Ucrania, es decir todos los miembros de la Unión Europea (UE), entre otros, a pagar por el gas de Gazprom en rublos.