Por Alejandro Durán
A pesar de mostrar ligeras señales de
recuperación, la inversión privada se mantiene muy lejos de los niveles
alcanzados previo a la victoria de Andrés Manuel López Obrador en las
elecciones presidenciales de julio de 2018.
Y lo anterior, porque de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), resulta que la Inversión Fija Bruta (IFB), se colocó en agosto de este 2021 en 95.6 puntos, muy por debajo de los 111.3 unidades alcanzadas en junio de 2018, previo a las elecciones presidenciales de aquél año.
En este sentido, la inversión privada se
mantiene débil en México, como consecuencia de la incertidumbre que enmarca el ambiente
de negocios en el país.
Por medio de un reporte, el INEGI informó que
la IFB, que representa los gastos realizados en construcción y en maquinaria y
equipo de origen nacional e importado, registró un incremento marginal de 1.1
por ciento durante agosto de este año respecto al mes inmediato anterior, con base
a datos ajustados por estacionalidad.
Por componentes, los gastos efectuados en construcción
aumentaron 3.2 por ciento, mientras que los de maquinaria y equipo total
disminuyeron uno por ciento en el octavo mes del presente año, según datos
ajustados por estacionalidad.
A tasa anual y de acuerdo con datos originales, resultó que la IFB creció 13.9 por ciento en agosto de este año, en donde la inversión privada en el rubro de la construcción avanzó 9.6 y el de maquinaria y equipo 20 por ciento.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de
Análisis Económico de Banco Base, consideró que bajo dicho escenario, es posible
que la inversión fija bruta de México crezca 13.4
por ciento en este 2021, lo cual resultaría insuficiente para resarcir los estragos
que dejó la caída de 18.6 por ciento en 2020.
“La recuperación se ha visto afectada por 1) incertidumbre y desincronización global por la pandemia y 2) incertidumbre por la política económica de México”, explicó la analista.