Redacción
Ante la implementación del
Sistema de Control de Precios Máximos de venta al público, determinado por la
Comisión Reguladora de Energía (CRE), las mil 292 Plantas de Distribución de
todo el País enfrentan condiciones adversas que imposibilitan mantener la
cobertura geográfica y el nivel de servicio que requiere la población
consumidora, provocando con esto el cierre de rutas de reparto, desempleo y
falta de inversiones estratégicas para garantizar el abasto a nivel nacional.,
afirmó , la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas Licuado de Petróleo y
Empresas Conexas (AMEXGAS).
Por medio de un reporte, refirió que en México hasta hace un mes existían 35 mil rutas de reparto y cuatro mil 700 estaciones de servicio, mediante las cuales se realizaban más de un millón de servicios diarios en los hogares, en ciudades, rancherías, así como en comercios, hospitales, tortillerías, panaderías, hoteles, restaurantes e industrias.
Debido a la situación
actual, AMEXGAS estima que ya han cerrado aproximadamente un 10 por ciento del
total de las rutas en el país, situación que podría agravarse en los próximos
días.
Dijo que el modelo
económico de precios máximos que establece la CRE debería reflejar la realidad
de los costos de operación de las empresas distribuidoras para evitar que se
sigan cerrando más rutas generando desempleo y principalmente para garantizar
el abasto a la población consumidora.
“De no hacerlo -alertó-,
esta situación podría afectar el suministro de este vital e importante
energético en el 80 por ciento de los hogares mexicanos y en millones de
pequeñas y medianas empresas que requieren del abasto diario de este vital
producto para sobrevivir y mantenerse en operación”.
Recordó que México produce el 40 por ciento e importa el 60 por ciento del gas L.P. que se consume en el país, por lo que la escalada internacional de precios del energético ha impactado en los precios en nuestro País y en el resto del del mundo.
Refirió que analistas
especializados consideran que estos precios seguirán subiendo durante los
próximos meses de invierno, razón por la cual se hace urgente definir una
“estrategia integral efectiva” que contemple los precios de Pemex, precios de
venta al público y los costos reales de la distribución, es decir, se requiere
de un modelo que sea sostenible, con apego a la realidad económica y que
garantice el abasto a la población mexicana.
La organización afirmó que,
de continuar operando con un modelo de precios alejado de la realidad
económica, se incrementa sustancialmente el riesgo de continuar eliminando
zonas de reparto por la incosteabilidad económica, generándose con ello más
desempleo, menos inversiones en infraestructura, más desabasto y fomentando con
este escenario el incremento del robo de gas, la inseguridad y distribución
ilícita del producto, afectando principalmente a la población consumidora.
“Es necesario realizar operativos para combatir la distribución ilícita que opera con absoluta libertad, construir un modelo económico y operativo sustentable y con bases realistas y fundamentalmente brindar las condiciones de certeza jurídica y certeza económica que fomenten la actividad económica y el empleo que tanto necesita en el País en beneficio de todos mexicanos”, afirmó.
Aun así, aseguró que las
empresas distribuidoras, refrendan su compromiso con los consumidores y con la
sociedad en general, para continuar trabajando y esforzándose al máximo en el
suministro diario a los hogares y comercios del País.
Finalmente, la industria
de Gas L.P. consideró que en tiempos de crisis el dialogo, la comunicación y el
trabajo coordinado son elementos indispensables para encontrar mejores
soluciones, por lo que solicitamos formalmente una reunión con la CRE y con la
SENER para revisar el modelo económico de precios máximos que se está aplicando
y coadyuvar en encontrar una estrategia integral que permita brindar las
condiciones necesarias para garantizar la distribución y el abasto de este
vital producto para todos los Mexicanos.