Red de corresponsales
Para preservar la salud de los yucatecos y evitar rebrotes que pongan en riesgo la capacidad hospitalaria del estado, a partir del lunes 14 de diciembre quedan cancelados los eventos sociales, como bodas, bautizos o fiestas similares que impliquen grandes aglomeraciones de personas.
Durante el periodo en que se ha permitido la realización de estos eventos sociales, se ha detectado durante las supervisiones que los protocolos no se estaban cumpliendo al pie de la letra de acuerdo con lo establecido en el acuerdo de reactivación económica, ya que quienes las convocan y quienes prestan los servicios de banquetes han actuado con irresponsabilidad, por lo que estas actividades siguen representando un foco de alto riesgo para la salud de los asistentes a este tipo de eventos y por consiguiente a todas las personas con las que interactúan.
En días pasados el Gobierno del Estado procedió a la clausura y aplicación de multas correspondiente a 18 negocios, entre restaurantes, gimnasios, banqueteras y organizadores de bodas, conocidos también como wedding planners, por incumplir con las disposiciones de la reapertura económica ante la pandemia del coronavirus.
Ésta y todas las medidas dispuestas ante la evolución de la pandemia han sido tomadas con base en las opiniones de los epidemiólogos y expertos en salud pública y privada de Yucatán que conforman el Comité de asesoramiento especializado en salud.
En la mayoría de este tipo de eventos se ha presentado el siguiente tipo de acciones que violan los protocolos establecidos: Aforo mayor a 50 personas en lugares cerrados y a 100 personas en lugares abiertos; mesas con un número mayor a las 6 personas que se permiten; eventos con duraciones prolongadas mayores a 4 horas y sin respetar el horario de movilidad hasta las 23:30 horas; uso incorrecto o nulo del cubrebocas; incumplimiento de las medidas de “Sana Distancia”, y uso de pistas de baile.
Existe evidencia de que un evento social como una boda sin el cumplimiento de los protocolos establecidos es un foco de contagio grande que pone en riesgo la salud, así como de la capacidad hospitalaria en el estado.
En Yucatán, a partir del 2 de noviembre se autorizó la realización de este tipo de festejos, luego de mantener una vía de comunicación efectiva con las empresas organizadoras de eventos y banqueteras, con el objetivo de que las familias que dependen de estas actividades puedan obtener ingresos sin poner en riesgo la salud de las y los yucatecos.
Por lo que, el Gobierno del Estado lamenta que no se hayan cumplido los protocolos establecidos, y reitera que, en Yucatán, lo primero es la salud de la gente y que de ponerse en riesgo la capacidad hospitalaria del estado, se tendría que dar marcha atrás en la reapertura económica.
En ese sentido, la administración estatal se mantendrá firme en vigilar el cumplimiento de las disposiciones con el objetivo de mantener una reapertura económica segura en el estado. De igual manera se le exhorta a los negocios y empresas autorizados para operar que cumplan con los protocolos establecidos dentro de la reapertura económica.