Por Alejandro Durán
Aunque en junio mostró señales de recuperación, la inversión privada se mantiene en mínimos históricos, pues de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante el sexto mes del año reportó un retroceso de 24.1 por ciento a tasa anual, con lo que ligó 15 caídas consecutivas.
Sin embargo, en su comparativo mensual y con base a datos ajustados por estacionalidad, reportó una recuperación de 20.1 por ciento respecto a mayo, lo que representó el mayor avance mensual del que se tenga registro (en febrero de 1993 comenzó la medición de la variable).
Cabe mencionar que la caída a tasa anual de 24.1 por ciento superó la expectativa que tenían los analistas de Citibanamex, en el sentido de que proyectaban una contracción de 23. 6 por ciento. No obstante, el consenso de los especialistas era una baja de 39.5 por ciento.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económicos de Banco Base, explica que el bajo dinamismo que reporta la Inversión Fija Bruta (IFB), no responde exclusivamente a los efectos provocados por la pandemia, sino a la incertidumbre que provoca la política pública de la presente administración federal, pues recordó que la contracción que experimenta variable es desde principios de 2019.
“Si bien la inversión en maquinaria y equipo se recuperó con la reapertura de la economía, la inversión en el sector constructor aún permanece baja y su deterioro comenzó desde el año pasado, por la falta de confianza del sector empresarial en la economía”, explicó.
La Inversión Fija Bruta representa los gastos realizados en maquinaria y equipo de origen nacional e importado, así como los de construcción.